El acontecimiento es inevitable si sois padres de escolares, por lo que no tiene sentido reflexionar. Mejor aún, pensemos en lo que se debe hacer en agosto para que sea más fácil entrar en la atmósfera de aprendizaje.
Además de correr por las tiendas con una lista de cosas y material de oficina necesarios, es importante:
Comience a restaurar sus patrones de sueño y descanso; sí, en verano puede permanecer despierto hasta la medianoche y despertarse a la hora del almuerzo. Pero para entrar sin problemas en el ritmo de trabajo, es mejor empezar con antelación.
Involucrar al niño en las actividades. Sí, ya en agosto. Por supuesto, no puedes repetir inmediatamente lo que has aprendido desde la mañana hasta la noche. Gradualmente. Entretanto, recuerda la tabla de multiplicar, el Teorema de Pitágoras o el argumento del Cuento del pescador y el pececito, y resuelve ejemplos sencillos. Juega palabras, ciudades y otros juegos educativos. Hojee nuevos libros de texto, termine de leer el último libro de la lista de lectura de verano.
Reorganice la habitación, limpie el pupitre de la escuela, coloque un cactus frente al monitor, coloque los libros de manera hermosa: cualquier manipulación en el lugar de trabajo para que el niño se sienta cómodo y quiera sentarse a recibir lecciones lo antes posible. ¡Funciona!
Hablar sobre un próximo evento. Recuerden juntos los buenos momentos de su época escolar, pregunten por sus compañeros, escuchen las emociones del niño. Dígale cuántas cosas interesantes le esperan por delante y usted siempre estará ahí para ayudarlo en las dificultades.
Fomentar sus iniciativas y anhelos de independencia. Déjelo empacar su mochila escolar solo, pregúntele qué le gustaría usar el primer día de clases, cómo colocará sus útiles escolares en su escritorio. Déjese llevar por esta planificación y por la comprensión de que lo está haciendo él mismo. Además, saber qué y cómo será más fácil para el niño los primeros días, y tú también estarás más tranquilo, porque podrás comentar y solucionar con antelación las dificultades que surjan.
reuniones con compañeros de clase. Al final del verano, podrás ponerte de acuerdo con otros padres y concertar varias reuniones. Esto puede resultar especialmente útil si su hijo está ingresando al primer grado. Entender que tendrá a alguien familiar en su nuevo lugar hará que los primeros días en el colegio sean más fáciles.
Pero agosto sigue siendo vacaciones. Camine, juegue, comuníquese con los niños para que se den cuenta de que ninguna escuela da miedo si tienen a su lado padres comprensivos y cariñosos.